Adiction

Soy Mariana Celis y estoy aquí porque también tengo una adicción. ¡Los que estamos aquí la padecemos!

De hecho, según las terapias, esta es una forma de empezarme a curar.

Cuando recuerdo, al mirarlos, como me siento es una forma de tener el poder de superarme.

Me vienen escalofríos. Me tiemblan las manos. Busco y me alejo de mi adicción. A pesar de verla, de tocarla, de sentirla. La tengo en la piel, en los labios. Una ligera sed corre por mi lengua. Lucho incontables horas por no pensar en el objeto deseado, anhelado.

Hay ocasiones en que no puedo más y me acerco. La tomo, la guardo, la huelo. Unas más cedo y dejo llevarme por los beneficios de regresar a ella. Al principio es un placer inmenso, pero luego me castiga y se burla de mí. Me habla. ¿A ustedes les pasa igual?

¿No los despierta en medio de la noche y los obliga a lenvantarse? ¿A observar con claridad y nerviosismo? ¿A conocer que estás entre sus manos...que va a ganar una vez más...?

Por eso estoy aquí. Por eso. Porque no he podido más...

No se asusten. No les dolerá... tanto. Agradezcan les liberaré de su adicción con una más.

¿Muerte? No. Sólo ayuda.




(Noches de luna llena II)